MODA EN LA GRAN PANTALLA
El cine es mucho más que entretenimiento: es un espejo de la cultura, un lenguaje universal que nos emociona, es el portal a la mente de un director. Cada detalle en la pantalla importa, desde la luz y la música hasta el vestuario que viste a los personajes.
Ahí es donde la moda entra en juego. La ropa en el cine no es un simple accesorio: ayuda a definir personalidades, épocas y estados de ánimo. Basta pensar en el vestido negro de Audrey Hepburn en Desayuno con diamantes o en los looks futuristas de Matrix para entender cómo un vestuario puede convertirse en icono cultural.
Detrás de esa magia está el director de vestuario, un oficio poco reconocido dentro de la industria de la moda, pero absolutamente esencial en el cine. Son ellos quienes convierten en realidad las ideas de un director o las descripciones de un libro. Analizan personajes, investigan contextos históricos, crean paletas de colores y diseñan o seleccionan cada prenda con un objetivo claro: dar vida a alguien que, hasta ese momento, solo existía en el guión. Un icono en el vestuario es Ruth Carter, ganadora de dos Oscar por su trabajo en Black Panther (2019) y Black Panther: Wakanda Forever (2023). Es una directora de vestuario afroamericana, en su carrera ha vestido a su colectivo en diferentes contextos, muchas veces de la mano del director Spike Lee, con quien ha trabajado en numerosas películas.
A veces nuestros diseñadores favoritos se cuelan detrás de las cámaras para darnos momentos icónicos del cine y la moda. Como en la reciente película Challengers de Luca Guadagnino (2024), en la que Jonathan W. Anderson participó en el vestuario, dándonos un momento viral con la camiseta de “I told ya!”.
Y si hablamos de marcas que unen cine y moda en la vida real, el mejor ejemplo es SCRT. Esta firma londinense nació en 2010 como un proyecto artístico con creativos emergentes, y con el tiempo encontró su identidad en la cultura pop y el cine de culto. Hoy sus colecciones rinden homenaje a directores como Stanley Kubrick, Sofia Coppola… Películas como Donnie Darko, Eternal Sunshine, La Haine... Todo ello con un estilo inconfundible que mezcla nostalgia y funcionalidad, gracias a patrones inspirados en el workwear vintage.
Además de sus referencias cinematográficas, SCRT mantiene el mismo espíritu creativo y responsable con el que nació: cada pieza se diseña en su estudio de Hackney, en Londres, y se produce en Portugal de forma ética, con materiales orgánicos y packaging reciclado. Así, cada colección no solo conecta con el séptimo arte, también responde a un consumidor consciente que busca moda con carácter y con historia.
El cine y la moda hablan el mismo idioma: los dos crean personajes, imaginan mundos y los llevan a la realidad. Marcas como SCRT, nos permiten llevar en la piel esas historias que tanto nos marcaron en la pantalla. Ya disponible en Studio Store
